No todo el mundo puede permitirse un jet privado. Poseer uno requiere una fortuna considerable. Es el caso de muchos famosos, cantantes, deportistas y hombres de negocios de fama mundial. Roman Abramovich se ha comprado un Dreamliner. He aquí todo lo que hay que saber sobre el empresario y su nuevo avión privado.
Para sus desplazamientos aéreos, Abramovich ha optado por equiparse con un avión de pasajeros hecho a medida, capaz de volar distancias muy largas a cualquier destino.

El avión privado de Roman Abramovich: un Boeing 787-8 Dreamliner
Roman Abramovich es un hombre inmensamente rico, propietario de yates, villas -incluida una en Francia- y una impresionante colección de coches.
Se compró un Boeing 787-8 Dreamliner por unos 231 millones de euros. Tras la personalización completa, la factura habría superado los 320 millones de dólares.
Características del jet privado de Roman Abramovich
El Dreamliner de Abramovich fue construido en 2015 para la compañía suiza Privateair, pero la empresa quebró antes de que el avión fuera entregado.
Solo hay 250 ejemplares de este avión de lujo en el mundo. Abramovich es, por tanto, uno de los pocos privilegiados en poseer uno.
El avión puede transportar hasta 50 pasajeros: 10 guardias de seguridad, 10 miembros de la tripulación y 30 invitados.
Tiene una superficie de 224,4 m² y un alcance de 18.418 km.
El Dreamliner está considerado uno de los aviones tecnológicamente más avanzados del mundo, equipado con auténticos espacios habitables: un comedor que puede albergar un banquete, una sala de cine, dormitorios privados con camas king-size y un amplio cuarto de baño con lavabos dobles, encimeras de mármol y una gran ducha a ras de suelo.
Todo está diseñado para que los pasajeros puedan pasar largas horas en el aire sin aburrimiento ni incomodidad.
Además de su lujosa distribución, el Dreamliner se beneficia de una presión de cabina reducida gracias a una tecnología que mantiene una altitud de cabina más baja durante todo el vuelo.
El avanzado sistema de filtración del aire garantiza una mejor oxigenación y niveles óptimos de humedad, limitando la fatiga y la deshidratación.
Un avión a imagen de Roman Abramovich
El multimillonario ruso quería un avión que se le pareciera.
Su librea exterior es reconocible al instante: líneas blancas, grises y marrones, con franjas negras oblicuas alrededor de la cabina que recuerdan a una máscara, de ahí su apodo: «El Bandido».
En términos de seguridad, el avión está equipado con un sistema de defensa antimisiles equivalente al utilizado por el gobierno estadounidense.
El interior exacto del Dreamliner no ha sido desvelado, pero se describe como extremadamente refinado y lujoso, a imagen y semejanza de su propietario.

¿Por qué necesita Roman Abramovich un jet privado?
Antiguo propietario del club de fútbol inglés Chelsea FC, Roman Abramovich se vio obligado a vender su equipo en 2022 tras la guerra de Ucrania.
Procedente de la industria petrolera rusa, ahora posee varias empresas en Inglaterra y reparte su tiempo entre varios países.
Un jet privado le permite desplazarse rápidamente entre sus distintos negocios, ya sea en Londres, Moscú o cualquier otro lugar.
Pero más allá de las razones profesionales, también está su vida personal. Abramovich utiliza su avión para visitar a su familia en Rusia o para ir de vacaciones con su mujer y sus siete hijos a sus residencias repartidas por todo el mundo.
Para personalidades de este nivel, la discreción y la seguridad son necesidades absolutas.
Los vuelos privados les ofrecen un espacio protegido y confidencial, al tiempo que les mantienen conectados y productivos durante sus viajes.
Más información sobre Roman Abramovich
Roman Arkadievich Abramovich es un empresario ruso-israelí-portugués, oligarca y ex político.
Fue gobernador del distrito autónomo de Chukotka (Extremo Oriente ruso) de 2000 a 2008.
Según Forbes, su fortuna se estimaba en más de 15.400 millones de dólares en 2021, lo que le convertía en el 124º hombre más rico del mundo.
Llamó la atención del gran público tras comprar en 2003 el Chelsea FC, que mantuvo durante casi veinte años.
Muy implicado en el fútbol, también ha realizado importantes inversiones en Portugal: más de 90 millones de euros con el Benfica y 74 millones de euros con el FC Porto.
Abramovich también posee varias empresas en el Reino Unido, sobre todo en los sectores petrolero, financiero e inmobiliario, lo que consolida su posición como una de las figuras más influyentes del mundo de los negocios.