Sliv Air: Paris Hilton firma un Gulfstream a su imagen y semejanza

Un regalo que se hizo evidente

Paris Hilton no pasa desapercibida, y su avión tampoco. Regalado por su marido, el empresario Carter Reum, su nuevo jet privado tiene un nombre explícito: Sliv Air. Se trata de un Gulfstream G450 completamente renovado, que se ha convertido en una extensión aérea de su universo visual.

El proyecto, dirigido por la diseñadora Sarah Mespelt Larrañaga, ha durado un año. El exterior, repintado en un rosa tornasolado que ahora se llama «rosa París», exhibe sus lemas más conocidos. El interior prolonga esta firma con un nivel de acabado poco común: moqueta de lentejuelas rosas, sillones de cuero cosidos a mano, un sistema de iluminación en siete tonos de rosa, pero también detalles inesperados: una nevera con antifaces, colibríes rosas pintados en el techo y copas de champán diseñadas a medida.

Este jet no se diseñó para integrarse en el paisaje. Afirma una estética, una vida, una firma.

Dormir, comer, existir a 40.000 pies

La cabina de Sliv Air se ha diseñado como un lugar para vivir, no como un decorado. Varias zonas se han diseñado como extensiones de un interior personal. Las cómodas camas, forradas de Barbie rosa o de cuadros con motivos de corazones, con cojines y accesorios de noche a juego, crean un auténtico espacio de descanso.

El salón, con sus tonos beige, madera mate y toques pastel, está pensado para la calma. La iluminación está controlada y el mobiliario es suave y acogedor. Durante un vuelo de Los Angeles a Nueva York, Paris Hilton incluso instaló una tarta personalizada con su serie The Simple Life.

La cocina totalmente equipada, con encimeras de mármol, electrodomésticos integrados y zonas de servicio claramente definidas, refleja un deseo de confort discreto, y de continuidad con el estilo de vida en tierra.

Cuando la cabina se convierte en un lenguaje personal

Este Gulfstream no está simplemente amueblado, está diseñado para reflejar a una persona. Sliv Air encarna esta tendencia creciente entre los clientes UHNWI: transformar la cabina privada en una extensión de su identidad, tanto como en una herramienta de movilidad.

AEROAFFAIRES no es ajeno a este tipo de proyectos: configuración interior, elección de acabados, coordinación con diseñadores, gestión de certificaciones, asistencia en la puesta en servicio. Todo ello se basa en una idea simple: un avión debe parecerse a sus ocupantes.